Ricardo Sánchez Tamayo| Bayamo | Cuba | 5. junio. 2015
El
Rio Bayamo, antes navegable y por varias
generaciones fuente de riego, alimentación, disfrute y abasto de agua, recibe
el Día Mundial del Medio Ambiente, con su lecho empañado por las aguas
residuales y agentes contaminantes,que por varios afluentes se le añaden a
diario.
Desde
varios puntos de la geografía bayamesa, llegan al rio aguas contaminadas
provenientes del antiguo sistema de alcantarillado. La urbanización del Centro
Histórico de la ciudad data de más de 55 años y cuando se realizó se concibió
que la evacuación de las aguas albañales y pluviales fueran directamente al
río, como era normal en esa época.
El sistema de recogida y tratamiento de
desechos sólidos y líquidos actual resulta obsoleto, casi inexistente. Un
recorrido a pie, por las riberas del rio permite ver innumerables vertederos
y arroyos de aguas contaminadas que
dañan su ecosistema.
Desde
el arroyo Manegua, hasta el puente del Salao, siguiendo el curso del rio son
varias la fábricas, empresas, establecimientos y desagües albañales que vierten
allí sus desechos, los más grandes contaminantes pertenecen a las empresas
láctea y cárnica.
Ludín
Fonseca García. Historiador de Bayamo, en el Proyecto 500 aniversario de la
fundación de la villa expresó: “Esta es una de las problemáticas ambientales y
ecológicas que más afecta a la ciudad de Bayamo pues el vertimiento de
industrias, y viviendas van hacia el río, lo cual implica una agresión y limita
su utilización … La construcción de un
sistema de evacuación de residuales líquidos eliminaría el sistema de fosas y
el vertimiento al río, el cual no solo posee importancia para el mantenimiento
del entorno ecológico, sino que es también un sitio histórico de la ciudad.”
Vecinos
de la calle Máximo Gomes, que sus casas los patios dan al rio, señalan las
grandes manchas de petróleo y grasa que flotan, “Esto acaba con el sistema
ecológico y los animales, a veces uno ve la cantidad de peces muertos que da lástima,
me parece que deben tener algún lugar para echar esa suciedad y el Gobierno
debería multar los dirigentes de esas fábricas para que esto no ocurra, esto no
debe ser” no sabe cuántas personas cocinan y beben de esa agua, porque la de
acueducto se acaba justo al salir de Bayamo… parece que no hay ojos que vean
esta barbarie y el rio, está pidiendo el cese de la contaminación.
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