martes, 19 de marzo de 2024

¿Qué hace falta para que se produzca un cambio en Cuba?

Por. Ramón Zamora Rodríguez.

Apagones interminables, hambre, desabastecimiento, represión, prisión, desolación y almas que andan zombis sin objetivos definidos; así está Cuba, donde todos quieren libertad y sólo unos pocos tienen el coraje de reclamar, donde muchos tiene que emigrar ante tanta complicidad por un Síndrome de Estocolmo que lleva a quienes viven como esclavos a denunciar a quienes claman por derechos y libertades. 

Eterno solo Dios, a Cristo redentor ni el diablo lo tumba, pero a una dictadura por muchos militares cómplices de la injusticia sobre los suyos, por mucha represión que derroche sobre el pueblo ¡Sí cae! Cae por la fuerza descomunal de todo un pueblo cansado de tanto sometimiento, conformismo, esclavitud y terrorismo de Estado, así cayó la dictadura recientemente en Sri Lanka ¿Los cubanos nos sentimos menos, nos creemos incapaces? ¿O nos han hecho creer eso?

Nadie quiere salir de su zona de confort, todos tenemos miedo, pero superarlo será siempre el sinónimo de libertad ¿Qué no hace un padre o madre por sus hijos? ¿Qué no eres capaz de hacer por los que amas? ¡Veo que nada! ¿Falso amor o confusión? Porque sí haces lo que sea por los tuyos ¿Por qué no haces nada ante la tortura a la que somete la dictadura a los tuyos? No lo hagas, si quieres, por los vecinos o extraños, hazlo por los tuyos que dices que amas o hazlo por ti.

No pido que hagas cosas que yo no soy capaz de hacer o no he llegado hacer ¡Te pido que hagas algo por ti y por los tuyos! ¡Quítale el poder a la dictadura! No los apoyes, no pagues ni pertenezcas al CDR, CTC, FMC, ni a nada que empodere al régimen, no denuncies al que hace lo que no te atreves hacer, no participes en sus convocatorias ¡A ninguna! Cuando cortan la electricidad, no trabajes, no lleves a tus hijos a la escuela, únete a los cacerolazos, ellos no podrán arrestar a todo un pueblo, podrán tomar a algunos para implantar el terror, pero no a todos, como tampoco te pueden sacar de tu casa para que acudas a sus llamados ¡La decisión de quitarles el poder es tuya!

La Iglesia está llamada a ser la luz del mundo, no una luz, si no, la luz, Dios quita y pone reyes, y sólo debe su obediencia a Dios, no a tiranos tan perversos que muestran ser salidos del vientre de Satanás.

Les dejo las palabras del Padre Alberto Reyes Pías, sacerdote que vive en Esmeralda, provincia de Camagüey, quien iluminado por el mensaje de nuestro redentor al pueblo cubano, nos regala éstas palabras, usted sabrá si tocan su corazón endurecido por el temor, sometimiento, conformismo y esclavitud de una dictadura adoctrinadora y terrorista.

Palabras del Padre Alberto Reyes Pías.

Soy el padre Juan Alberto Reyes, y he estado pensando en pedir a Dios que las cosas empeoren ¿Qué hace falta para que se produzca un cambio en Cuba y termine esta pesadilla infernal? ¿Cómo salir de esta espiral de deterioro cada vez más profunda?

Sabemos que sin un cambio de sistema, nada nos sacará de esta crisis, que la economía cubana no va ha remontar, y que ni el turismo, ni las remesas, ni ninguna otra inyección, lograrán solucionar nuestras necesidades básicas.

Pero eso parece que no es suficiente para movilizarnos, sabemos que nuestros dirigentes nos mienten, intentando con sus mentiras alargar lo más posible su permanencia en el poder, a costa del sufrimiento y la muerte lenta de un pueblo que no les interesa y que más bien parecen odiar y despreciar.

Pero eso no nos irrita lo suficiente como para decir ¡Basta!

Somos conscientes de que la formación de nuestros hijos es cada vez más deficiente y precaria, nos damos cuenta, de que si le dejamos al sistema educativo la formación de nuestros hijos, los estaremos sumergiendo en la ignorancia y la incapacidad, pero eso no parece quitarnos el sueño, sabemos que el sistema de salud se cae a pedazos, y que nuestra supervivencia física está cada vez más en riesgo, pero eso sólo hace que aumenten muestras quejas cotidianas.

Vemos cómo la vida se bloquea hasta lo impensable, como la falta de electricidad nos paraliza, nos hunde y desespera, pero seguimos aplaudiendo las migajas de corriente y agradeciendo incluso los días en que los apagones son cortos.

Sabemos que desde las estructuras del poder no existe un proyecto de nación, que ya no vamos a ninguna parte, que el único camino que tenemos delante es resistir y morir, excepto para aquellos que logren escapar de esta jaula, de ésta finca de unos pocos.

Pero ni siquiera eso parece ser capaz de despertarnos de la hipnosis de una solución venida desde los que nos gobiernan como su propiedad particular.

¿Qué tiene que suceder para que este pueblo despierte? ¿Cuánta hambre necesitan seguir pasando nuestros hijos? ¿Cuántos medicamentos más deben faltar a nuestros enfermos? ¿Cuántas familias más necesitan romperse con la emigración? ¿Cuántos muertos más necesitamos en los intentos de huida? ¿Cuántas voces de libertad necesitamos añadir a nuestras prisiones?

Sí al menos tuviéramos el coraje de decir la verdad en todos los sitios posibles, si al menos dejáramos de hacer el juego, el más mínimo juego a los que apoyan nuestra esclavitud ciudadana, si al menos intentaramos plantarnos cuando se nos pide el apoyo sumiso, el aplauso cómplice, el asentimiento falso, porque de lo contrario, habrá que pedir a Dios que permita que todo el mal que ya se abate sobre este pueblo se profundize, que nos hundan el hambre, la enfermedad, la oscuridad y la desesperanza, para ver si así Cuba termina siendo un montón de cadáveres amontonados, o un pueblo que se decida por fin a hacer algo por su libertad

martes, 20 de febrero de 2024

Racionan a una sola comida por reos en la Prisión Provincial de Holguín

Por. Ramón Zamora Rodríguez.

La crisis económica generada por el fracasado y obsoleto castrismo, no solo deja sin sustento y a obscuras a la población civil en toda la isla caribeña, sino, que en peores y desastrosas condiciones a la población penal recluida en las diferentes cárceles y prisiones del país. En la prisión Provincial de Holguín, en reiteradas veces se le está suministrando una sola comida a los reclusos, excesivamente racionada y en ocasiones en estado descompuesto las pastas,  cárnicos entre otros productos con los que son elaborados estos alimentos; las raciones son tan limitadas, que en pocas semanas los reos se depauperan a tal grado, que parecen concentrados en un campo de exterminio del antiguo nazismo Hitleriano.

Sumado a esto, las quejas por la falta de atención médica por la crisis de medicamentos generada por el fracaso económico gubernamental; los pocos y costosos medicamentos que a duras penas logran llevar los familiares, muchos no llegan a ser alcanzados por el recluso a quien le fue destinado, porque son robados por el personal del MININT al que le fue entregado, o, éste sólo le entrega una parte del medicamento. Otros reclusos con delicado estado de salud y con cáncer, carecen de seguimiento por especialistas porque no son llevados a consultas programadas en los Hospitales Clínico Quirúrgico y Lenin de Holguín.

Las quejas de familiares ante los altos mandos de Cárceles y Prisiones ante estas y otras arbitrariedades, solo traen más desgracia dentro del penal para el recluso que su familiar puso queja ante la supuesta autoridad competente, pues el ensañamiento contra éste va desde el Director del reclusorio, hasta de los mismos reos que sirven de perros falderos a los guardias por prebendas, obligando por terror al silencio y sometimiento total a los presos a mantener silencio ante las torturas, tratos crueles, inhumano y degradantes a los que están obligados a vivir diariamente.

Sí recibiendo las dos percapitas limitadas de alimentos, los reclusos enferman alarmantemente por la reacción de un sistema inmunológico deficiente ¿cuánto más y en pésimas condiciones quedan, ante una sola ración en todo el día?  tal vez muchos piensen que se lo merecen por delinquir, la realidad es que todos no son delincuentes, pero sean o no, todos tienen derechos, su pena se limita a la privación de libertad, no a la privación de sus derechos, y tal vez hoy no, pero mañana usted puede sentir el clavo en sus zapatos por usted mismo, o por alguno de los que ama, y entenderá que la injusticia se combate desde que se genera, antes que se convierta en ley, en un país acostumbrado al sometimiento y control por leyes, que solo sirven para pisotear y extirpar los derechos del pueblo.

Sí esto es así para la población penal común ¿Imagina usted cuanto más sufrimiento recae sobre los que cumplen injusta prisión por motivos políticos y de conciencia?

¡Basta de injusticia, de tortura y violaciones de las Reglas Mandela y de Derechos Humanos en las cárceles de Castro!   ¡Basta de complicidad por parte de la ONU, ONG'S y políticos corruptos por todo el mundo con la asesina y terrorista dictadura militar Castrista!   ¡Exigimos la libertad inmediata e incondicional de todos los prisioneros por motivos políticos en las infernales cárceles de Castro!