Por: Ramón Zamora Rodríguez
La niña Keila Freeman
Rodríguez de 3 años de edad, sufre de manera persistente de asma, una patología
que azota penosamente a niños y adultos sin distinción de sexo ni raza, y por
esta patología fue por la que Rafael Freeman y Ana Delia Rodríguez, quienes son
opositores pacíficos, acudieron al Policlínico José Ávila Serrano sito en la
Localidad de Velasco, Gibara, Holguín, con el ánimo de calmar el cuadro de asma
que presentaba su hija Keila.
En la consulta la
Doctora residente que se encontraba, Yailín Escalona Zaldívar con Registro
profesional. 39528, quien sufre el mal de los Castros, que es el de la falta de
motivación por la baja remuneración y el exceso de problemas para todo, comenzó
por darle prioridad a otros pacientes que para nada estaban identificados con
patologías de código rojo o verde para cederles preferencias delante de una
pequeña niña de 3 años de edad y con marcada disnea, motivo del asma, pero la
falta de motivaciones más la corta edad de la Doctora residente Yailín Escalona
que se encontraba ejerciendo en el mencionado Policlínico este pasado domingo 8
de junio de 2014 al filo de las 10:00am, no le permitían ver la iatrogenia y la
falta de profesionalidad que ejercía con la niña Keila, dándole paso a
conocidos y amigos.
Al reclamo de los
padres de la pequeña, la Doctora Yailín ofendida en su amor propio de sentirse
más grande profesionalmente para que le digan lo que tiene que hacer, en tono
impropio a su profesionalismo, más que indicó, ordenó que salieran de la
consulta con la niña o no atendería a nadie más, los padres exigieron ver al
Director del Policlínico quien nunca se presentó, pero al abandono de la
consulta de la Doctora residente Escalona Zaldívar, se presentó la especialista
MGI quien después de escuchar las quejas sobre la postura informal de la
residente, presto atención a la paciente Keila.
La preocupación de los
padres estriba en que esta situación se ha repetido en otras ocasiones, donde
sin hablar de una mente afectada emocionalmente por las tendencias de una
dictadura, cabe sin dudas pensar, que todo puede estar asociado a
manipulaciones de policías secretas que amañan el diagnostico y hasta el
medicamento para cualquier paciente que disienta de esta dictadura, sumando que
pueden tantear la respuesta de un padre que considera en peligro la vida de su
hija, por muy pacífico que sea, o por mucho que intente no someterse a caminos
de violencia, cuando se trata de aquellos (nuestros hijos) por los que
desgarramos nuestros corazones, de ser necesario para defender sus vidas.
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